A mediados de los años 60, el Ministerio de Defensa sueco expuso los requisitos para un nuevo tanque ligero. El vehículo ligeramente blindado debía combinar alta velocidad y maniobrabilidad con un armamento potente que fuera suficiente para oponerse a los tanques modernos y proporcionar fuego de apoyo a la infantería. Landsverk desarrolló varios proyectos con una torreta giratoria y un cañón montado sobre una superestructura fija. Eran esencialmente cazacarros. El desarrollo del proyecto se interrumpió en la etapa de diseño y modelado.